El presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, el perredista Jesús Zambrano, hizo un llamado a las distintas fuerzas políticas para que en este periodo ordinario de sesiones sea aprobada la Reforma Política que confiere al Distrito Federal.

Este dictamen que se quedó en la congeladora en el pasado periodo ordinario de la 62 Legislatura, da plena y total personalidad jurídica con autonomía de gestión, un Congreso local, y 16 alcaldes en sustitución de las figuras de las y los actuales jefes delegacionales.

Por ello, Zambrano Grijalva recordó que esta reforma es una deuda histórica con más de ocho millones de mexicanos que no gozan de los mismos derechos que posee el resto de la población que sí es regida por una constitución local, e indicó que con esta convocatoria sólo se deja en claro que las y los capitalinos exigen un trato igualitario al que ya poseen ciudadanos de las demás entidades de la República.

"Por la falta de una constitución propia, sostuvo, los habitantes de la capital del país no tienen derecho ni acceso a fondos federales que sí son otorgados al resto de las entidades; pero mientras, deben sufragar los gastos que implica ser la capital de la República y albergar instalaciones de los tres poderes de la Unión, embajadas y un número importante de edificios públicos con los impactos que ello amerita en dotación de servicios como transporte; recolección de basura, energía eléctrica y abasto de agua, entre otros", describió quien fuera también líder nacional del PRD.

Recordó que, dada su trascendencia, esta Reforma ya fue avalada por integrantes de las cinco fuerzas políticas representadas en el Senado de la República desde abril pasado y ahora, la resolución para concretarla está pendiente en la actual Legislatura de la Cámara de Diputados.

Por ello, definió como una prioridad para esta diputación, el culminar dicho proceso quien destacó que -una vez que el Congreso de la Unión lo apruebe- se dará paso a cambios de la mayor trascendencia para la vida política del Distrito Federal al conferirle una autonomía inédita, y su primera Constitución Política mediante una Asamblea Constituyente democrática con la participación de amplios sectores de la sociedad.

De acuerdo con la minuta aprobada por el Senado a finales de abril pasado, una de las primeras acciones de trascendencia para la Ciudad de México deberá tener lugar dentro de nueve meses, el primer domingo de junio de 2016, cuando se realice la elección para conformar la Asamblea Constituyente que habrá de crear la primera Constitución, y ser instalada el 15 de septiembre.

La Constitución Política el 31 de enero del 2017 con -al menos- las dos terceras partes de sus integrantes; y sólo el Jefe de Gobierno tendrá el derecho de proponer la Constitución en tanto que los legisladores harán los cambios que consideren pertinentes en tal sentido.