El presidente de la Cámara de Diputados, Porfirio Muñoz Ledo, afirmó que la Mesa Directiva puede delegar sus funciones de conducción y dirección de los trabajos del pleno a un vicepresidente, quien debe garantizar el respeto entre pares y que la Asamblea desarrolle su trabajo de acuerdo al orden del día previamente acordado. Agregó que esto conforme a la Ley Orgánica del Congreso General y el reglamento de la Cámara de Diputados, y como sucede con otros parlamentos democráticos, incluida la Asamblea General de las Naciones Unidas, el Parlamento Europeo y la Asamblea Nacional Francesa, entre otras. Muñoz Ledo mencionó que la rotación de la función de la Presidencia en la conducción de la Asamblea, a través de los vicepresidentes, representa un signo de la pluralidad democrática y de la responsabilidad compartida para conducir el Congreso e incrementar su primacía entre los órganos del Estado. En ese sentido destacó que la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados como órgano de dirección, conformada de manera plural, tiene la atribución de conducir los trabajos del Pleno bajo criterios de imparcialidad y objetividad, así como facilitar el desahogo del orden del día para las sesiones. “El presidente de la Mesa tiene el deber, de acuerdo con la ley, de cuidar la unidad de la Cámara de Diputados, garantizar la inviolabilidad de la opinión, representar de manera institucional a los diputados que la conforman y ser el interlocutor con los otros poderes de la Unión”, indicó. En este sentido, Muñoz Ledo precisó que “el actual presidente de la Mesa Directiva cumple con su mandato político y legal inherente al cargo que desempeña”. Asimismo, subrayó, encabeza las tareas de diplomacia parlamentaria para fortalecer las relaciones del poder legislativo con sus contrapartes en el mundo./gh/m |