El Presidente de la Junta de Coordinación Política de la Cámara de Diputados, Silvano Aureoles, urgió al Ejecutivo Federal a dar el siguiente paso en las acciones para recuperar la gobernabilidad en Michoacán, y retomar de inmediato el control de las comunidades y municipios donde han ingresado las Fuerzas Armadas y las autodefensas comienzan a tener roces internos.

Cuestionado respecto a la detención de Hipólito Mora, pionero de las autodefensas en la zona de La Ruana, señalado por su presunta participación en el asesinato de dos personas, el diputado Aureoles Conejo pidió que la ley se aplique de manera irrestricta y con respeto a los derechos de las personas.

El legislador michoacano demandó que no se actúe en función de rumores y señalamientos sin sustento, porque las personas que acusan a Mora, “tampoco son peras en dulce”, enfatizó.

El también líder de los diputados perredistas insistió en que de inicio, algunos grupos de autodefensa son “buenos” y otros “malos”; pero al final todos resultan ser nocivos, ya que están actuando fuera de la ley, por legítimos que sean sus reclamos.

El coordinador de la bancada del Partido de la Revolución Democrática (PRD) en San Lázaro, calificó el tema como complejo y advirtió que si la autoridad federal no toma el control de inmediato en las comunidades michoacanas, puede convertirse en una “ruta interminable”.

Tras enfatizar que nadie puede estar por encima de la ley, aunque sus denuncias sean legítimas y valiosas, porque ello rompe con el Estado de derecho, alertó sobre el riesgo de quedar a merced de voluntades individuales y en medio del reparto de acusaciones fruto de intereses particulares.

Aclaró que lo que parecía ser una “luna de miel” entre autodefensas y gobierno, siempre fue una relación de convivencia obligada, pues las autodefensas han jugado un papel importante para que las Fuerzas Federales actúen contra el crimen organizado, porque ni soldados ni marinos conocen las comunidades, sus habitantes y sus vías de salida.

De modo que en el intento de retornar al orden, apuntó, los ciudadanos han tenido una gran colaboración, pero es preciso que no se deje escalar el fenómeno, al grado de que ninguna autoridad pueda hacer valer la ley.

“Poner en orden estas poblaciones (…) poner orden ahí significa que pues ya no se requieren los grupos armados de ciudadanos, porque esa tarea es del Estado nacional, es del gobierno, pues si ya está eso en orden, para qué quieres grupos armados adentro. Porque tan malo es, o tan riesgoso, para no calificarlo, tan riesgoso es que haya grupos delincuenciales haciéndole daño a la población, como grupos de autodefensas que al rato se estén confrontando entre ellos”, dijo.

“Es responsabilidad del gobierno ya decir: en estos municipios ya están las fuerzas, ya no se requieren los grupos de autodefensa, señores entreguen sus fierros, las armadas y aquí ya el gobierno se hace cargo de la seguridad. Eso tiene que ser el paso urgente, porque si ya empezó este conflicto, pues yo no quiero ver que al rato aparezcan en otros municipios y entonces se vuelva a descomponer todo. Es un cuento de nunca acabar”, advirtió. ys/m.