• Inauguran en San Lázaro foro “Reducción de Daños y Tabaquismo en México”

21-03-2018.-El diputado Jorge Álvarez Maynez (MC) afirmó que en México, en la última década, ha muerto cerca de medio millón de personas por enfermedades relacionadas con el tabaquismo, en cuya atención se gastan alrededor de 81 mil millones de pesos, por lo que es necesario actualizar la Ley General de Control del Tabaco para atemperar este problema de salud pública.

Durante la inauguración del Foro “Reducción de Daños y Tabaquismo en México, Reflexiones a 10 años de la Ley General para el Control del Tabaco”, señaló que no se puede mantener intacta una norma que fue pionera entre las mejores prácticas internacionales, pero que se ha desactualizado.

Consideró indispensable avanzar hacia un ordenamiento 100 por ciento libre de humo de tabaco, incrementar las advertencias en empaquetado y actualizar la carga fiscal.

“Vamos muy retrasados en este tema, pues no se ha actualizado la política impositiva; por lo tanto, la carga fiscal del Estado está desfasada de los estándares internacionales. México tiene un problema que enfrentar y debe atenderlo desde diversas perspectivas”.

Advirtió que “fumar mata, y una mala regulación también. Por eso hay que cambiar a Sistemas Electrónicos de Administración de Nicotina (SEAN). Hoy está en una prohibición total, en un esquema de no regulación, por lo que deben incentivarse y regularse”.

Reconoció que existen posiciones muy distantes al respecto, por lo que es necesario conocer la opinión de diversas organizaciones en la búsqueda de una agenda y que se conozcan todas las posturas sobre qué cambios requiere la Ley y cuáles no por considerarse riesgosos o peligrosos, porque pudieran causar un perjuicio a la salud pública o al consumidor.

De la Comisión Nacional contra las Adicciones (CONADIC), María José Martínez Ruiz, Directora General Técnico Normativa, señaló que anualmente el tabaquismo en México ocasiona la muerte de 49 mil personas (135 diarias) y tiene un costo directo anual por de mil millones de pesos.

Destacó que, de acuerdo con la Encuesta Nacional de Adicciones, la prevalencia de fumadores pasó de 17 por ciento en 2011 a 17.6 por ciento en 2017, es decir, de 14.9 millones personas de entre 12 y 65, 5.5 millones fuman diario, 9.4 millones son fumadores ocasionales y 1.8 millones tiene adicción a la nicotina.

Agregó que un millón de estudiantes de secundaria y bachillerato son fumadores y 85 mil 540 educandos de 5° y 6° de primaria fuman diariamente. Explicó que 45.3 por ciento de los muchachos de secundaria y 60.7 por ciento de los de preparatoria adquieren en tiendas productos de tabaco.

Respecto al cigarro electrónico, expresó que la Ley General para el Control del Tabaco prohíbe su comercialización en el artículo 16 fracción VI, pero “a pesar de eso, cinco millones lo ha usado alguna vez y 975 mil lo fuma actualmente”.

Consideró que el cigarro electrónico no es alternativa para la cesación del consumo de tabaco, pues no es más efectivo que la farmacoterapia; provoca inflamación de vías respiratorias, aumento de infecciones virales, genera adicción y no libera vapor de agua, sino compuestos carcinógenos. Además, su disponibilidad puede alentar el consumo en niños y adolescentes.

Planteó que esos cigarros se deben regular como productos o derivados del tabaco y aplicarles impuestos especiales, advertencias sanitarias, restricción de uso en espacios libres de humo de tabaco, prohibición de publicidad, promoción y patrocinio, regulación de puntos de venta y limitación de venta a menores de edad.

Refirió que desde 2010 se han presentado más de 30 iniciativas para reformar la legislación en la materia y a la fecha no ha habido un solo cambio, por lo que pidió reformar la Ley General para el Control del Tabaco, para volverla una norma 100 por ciento libre de humo de tabaco, establecer la prohibición total de la publicidad de los productos tabacaleros, aumentar a 50 por ciento los pictogramas en ambos lados del empaque y actualizar impuestos de tasa específica.

Advirtió que el consumo de tabaco, en todas sus presentaciones, representa un riesgo de daño severo a la salud y existen pendientes fundamentales en la agenda política para su control.

El asesor internacional en Prevención y Control de Enfermedades Crónicas y Salud Mental, de las organizaciones Panamericana y Mundial de la Salud, Miguel Malo, señaló que en América mueren 5.2 millones de personas por Enfermedades No Transmisibles (ENT), 80 por ciento por ciento del total de decesos, e indicó que las muertes por causas relacionadas al tabaco ascienden a un millón anualmente en la región.

Observó que todas las formas de tabaco son dañinas, incluyendo los productos de tabaco calentado, por lo que deben ser sujetos a las mismas medidas regulatorias.

“En este momento no se puede conceder credibilidad científica a ninguna cifra concreta sobre un uso ‘más seguro’ de estos productos, en comparación con el cigarrillo convencional. Dada la escasez y poca calidad de las pruebas científicas, no es posible determinar si pueden ayudar a dejar de fumar o si, por el contrario, pueden impedir que abandonen el tabaco”.

El director de Salud Pública de la Fundación Interamericana del Corazón México, Erick Antonio Ochoa, subrayó que México tiene uno de los desempeños más mediocres en la disminución de la tasa de fumadores. De acuerdo con la Encuesta Nacional de Consumo de Drogas, Alcohol y Tabaco, el número aumentó 3.4 millones respecto a la última medición en 2011 “y la epidemia no se detiene, especialmente entre niñas, niños y adolescentes”.

Explico que eso se debe a la ausencia de mejoras en la regulación. “El Congreso de la Unión ha mantenido intocada la Ley General para el Control del Tabaco” y en ocho años no se ha dado ningún avance para la aplicación del Convenio Marco de la OMS para el Control del Tabaco. La actual legislatura no puede pretextar ausencia de materia para mejorar las políticas”.

Refirió que los cigarros electrónicos tienen una amplia penetración, por lo que se debe advertir sobre los riesgos y consecuencias por su uso en niños, adolescentes y embarazadas. “El principal riesgo sanitario de la exposición a la nicotina es la inhalación, y la sobredosis de esta sustancia por ingestión o contacto cutáneo”.

En su presentación, Álvaro Israel Pérez Vega, comisionado de Operación Sanitaria, de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), señaló que se deben adoptar medidas y respuestas multisectoriales integrales para reducir el consumo de tabaco, a fin de prevenir enfermedades, discapacidad prematura y mortalidad.

Mencionó que el Convenio Marco de la OMS para el Control del Tabaco establece la colaboración entre las partes firmantes para facilitar la accesibilidad a tratamientos contra la dependencia del tabaco, incluidos los productos farmacéuticos.

Consideró que la regulación de SEAN y de Sistemas Similares Sin Nicotina (SSSN) debe incluir la prohibición de su venta y distribución a menores de edad; vedar o restringir su publicidad, promoción y patrocinio, e imponerles un tipo impositivo que los haga inaccesibles a menores, a fin de disuadirlos de su uso, así como un impuesto para impedir su consumo y reducir las recaídas.

También, prohibir por ley el uso de los SEAN y los SSSN en espacios cerrados o donde no esté permitido fumar y requerir advertencias sanitarias sobre los riesgos derivados de su empleo. Para reducir el peligro de intoxicación grave accidental por nicotina, deberán contar con un empaquetado resistente a la manipulación de los niños y un límite en la concentración y la cantidad total de nicotina, apuntó.

El Director de la Oficina Nacional para el control del Tabaco de la CONADIC, Juan Arturo Sabines Torres, consideró que los SEAN no constituyen una alternativa de disminución de daños a la salud ni para dejar de fumar. “Es un error pensar que son inofensivos pues contienen toxinas y sustancias carcinógenas”.

Precisó que, de acuerdo con el Comité de expertos de la Academia Nacional de Ciencias, Ingeniería y Medicina, el uso de cigarro electrónico incrementa las concentraciones de partículas de materia y nicotina en espacios cerrados; sobre la exposición de segunda mano al vapor del cigarrillo electrónico, dijo que se han encontrado "niveles medibles de nicotina y material particulado ultrafino que pueden absorberse en partes distales del pulmón”.

Destacó la urgencia de reformar la Ley General y abordar pendientes fundamentales en la agenda política para el control del tabaco.

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