• El diputado Diego Del Bosque pide formular un nuevo compromiso presidencial en la materia
• La diputada Irma Juan Carlos señala que defender el germoplasma de los maíces nativos garantiza la soberanía alimentaria de los pueblos indígenas

Palacio Legislativo, 28-10-2020 (Notilegis).- Diputadas y diputados de Morena exhortaron al Ejecutivo Federal, cumplir el compromiso de prohibir la siembra comercial de maíz transgénico y uso del herbicida glifosato, ya que se ha comprobado que puede provocar cáncer.

En conferencia de prensa presencial, acompañado de integrantes de su bancada, el diputado Diego Eduardo Del Bosque Villareal recordó que la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader) subió a consulta a la Comisión Nacional de Mejora Regulatoria (Conamer) un documento que contraviene el compromiso presidencial de prohibir el maíz transgénico y el uso del glifosato.

“Ante estos graves hechos, los diputados y diputadas de Morena nos pronunciamos en contra de esta acción de desacato, y exhortamos respetuosamente a nuestro presidente Andrés Manuel López Obrador, a que ordene el retiro urgente del texto promovido por la Sader”.

Asimismo, pidió se formule un nuevo decreto presidencial que cumpla con el citado compromiso.

Recordó que la Ley Federal para el Fomento y Protección del Maíz Nativo se promovió por la necesidad de eliminar el maíz transgénico en México, no sólo por ser peligroso para la salud, sino que puede contaminar todas las razas de maíz nativo que han credo los pueblos originarios.

Respecto del glifosato, señaló que está comprobado que es cancerígeno, por lo que en muchos países del mundo ha sido prohibido.

“Tenemos que transitar hacia una agricultura más saludable con el medio ambiente y las personas. Esperamos que este obedezca la indicación del presidente Andrés Manuel de blindar al maíz nativo y prohibir la entrada del transgénico, así como gradualmente ir dejando de usar glifosato para eliminarlo en 2024”, añadió Del Bosque Villareal.

La diputada Irma Juan Carlos, presidenta de la Comisión de Pueblos Indígenas, afirmó que defender el germoplasma de los maíces nativos, herencia milenaria, significa garantizar la soberanía alimentaria de los pueblos indígenas y no depender de empresas transnacionales para el suministro, siembra y producción de este elemental grano.

“Sumarnos a este pronunciamiento y pedir que acate la orden presidencial de proteger las razas de los maíces nativos y prohibir este químico (glifosfato) que lejos de beneficiar a la producción agroalimentaria daña la salud”, concluyó la diputada.

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